Psicoterapia con perspectiva de género

"No se nace mujer: se llega a serlo." – Simone de Beauvoir

La perspectiva de género analiza cómo las construcciones sociales asociadas al género se representan e inciden en la forma en que las personas actúan y comprenden la realidad. Por ello, constituye una valiosa herramienta de estudio, ya que permite examinar de cerca el modo en que los roles de género influyen en aspectos como las expectativas, la identidad, las relaciones de poder o la gestión emocional.
Gracias al Máster en Igualdad de Género cursado en la Universidad de Málaga, he adquirido recursos adicionales para incorporar esta perspectiva de forma efectiva en mi práctica terapéutica.

¿Qué significa en los tratamientos psicológicos la Perspectiva de Género?

Mi abordaje terapéutico integra la perspectiva de género en los tratamientos avanzados de Terapia Cognitivo-Conductual. De esta forma, se consideran tanto las similitudes como las diferencias asociadas a esta dimensión de la personalidad, así como los factores psicosociales que inciden de manera determinante en la salud psicológica, física y social. Gracias a ello, se promueve el desarrollo óptimo de las personas.

El enfoque de género aplicado a la Psicología Clínica contempla, a lo largo de todo el proceso de tratamiento, las condiciones diferenciales que afectan a hombres y mujeres en sus contextos sociales y culturales, derivadas de los roles de género tradicionales.

En este sentido, la perspectiva de género se configura como un modelo de análisis fundamental para comprender el comportamiento humano, pues revela dificultades que de otro modo podrían pasar inadvertidas. Así, permite diseñar herramientas y técnicas específicas para su estudio y aplicación, con el objetivo de mejorar la calidad y eficacia de los tratamientos psicológicos.

¿Cómo se integra y aplica la perspectiva de género en la práctica psicoterapéutica?

La perspectiva de género en la practica psicoterapéutica - Alejandra Torres | Psicóloga

 Trabajo con la autoestima y los roles de género
Los roles de género generan a menudo expectativas irreales sobre lo que debería ser un hombre o una mujer, lo cual puede derivar en problemas de autoestima. Al incorporar la perspectiva de género, identificamos y desactivamos estas creencias disfuncionales, propiciando un autoconcepto más sólido y realista.

Relaciones de pareja equitativas
La perspectiva de género también ayuda a detectar desigualdades en la dinámica de pareja. A partir de ello, promovemos relaciones más justas y basadas en la cooperación mutua, fomentando una comunicación saludable y efectiva.

Apoyo a personas LGBT+
La discriminación hacia personas no heterosexuales o no cisgénero puede causar experiencias muy similares de vulnerabilidad en la esfera personal y profesional. La terapia, al incorporar la perspectiva de género, proporciona estrategias para abordar expectativas sociales opresivas, sentimientos de culpa, inseguridades relacionadas con la identidad y la expresión de género, y otros desafíos específicos del colectivo LGBT+.

Adaptación a las problemáticas de salud mental según el género
Los roles de género influyen en cómo hombres y mujeres experimentan la vida y expresan sus problemáticas. Reconocer este factor me permite personalizar la atención, evitando una visión única o estereotipada de la salud mental.

Identificación de factores sociales en el malestar emocional
La perspectiva de género no se limita a examinar al individuo, sino que señala posibles causas en su entorno o incluso en la sociedad. Este enfoque facilita la búsqueda de soluciones que trascienden lo meramente personal, al comprender que en muchas ocasiones el cambio requerido implica ajustes en el contexto social.